Las láminas de protección solar no solo son nuestras aliadas en la época del verano, cuando el calor y el sol no dan tregua, sino que, además, sus características físicas hacen que sean de gran utilidad en las épocas de más frío. 

Estas son tres particularidades de las láminas de protección que destacan en el invierno:

• 1. ACTÚAN COMO AISLANTE

Las láminas actúan como aislante y, a pesar de que existen varias alternativas, siguen consagrándose como la opción más económica y efectiva.

2. CONTRIBUYEN AL AHORRO ENERGÉTICO

Las láminas bajo emisivas evitan que parte del calor producido por los sistemas de calefacción instalados en la vivienda se escapen hacia el exterior, lo que supone un ahorro energético notable en la factura de la luz o del gas.

3. GENERAN CONFORT

Consiguen eliminar la sensación de ‘pared fría’ a los vidrios de las ventanas aportando, de esta forma, mayor calidez y confort a las estancias de tu hogar.

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